Uso de extractos vegetales es una buena opción para combatir las plagas, consideran investigadores de la Facultad de Agronomía
Con el objetivo de compartir alternativas sostenibles en estrategias de control de insectos plagas, investigadores de la Facultad de Agronomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) consideraron que el uso de extractos vegetales en la agricultura es una buena opción para combatir las plagas, evitando el uso de los controles químicos, los cuales continúan siendo la principal estrategia de control que desencadena una serie de problemas.
La doctora María Alejandra Payán Arzapalo, junto a los doctores Pedro Iván López Cuén, Moisés Gilberto Yáñez Juárez y Felipe Ayala Tafoya, indicó los insectos plagas pueden llegar a afectar los rendimientos de producción de alimentos que busca satisfacer la alta demanda que existe en la actualidad, y al usar un control biológico como lo son los extractos y aceites vegetales se evitaría la contaminación que genera los químicos.
“Una alternativa amigable con el medio ambiente, con los mantos freáticos, con el suelo, la planta, y lo más importante con el consumidor, ya que son elaborados de extractos vegetales a bases de plantas que generalmente tenemos en nuestra casa como cebolla, ajo, neem, cempasúchil o flor de muerto, canela, semilla de aguacate, entre muchos que tienen propiedades insecticidas”, detalló.
Explicó que su elaboración es por medio de una simple infusión o té de forma casera con ciertas partes de las plantas, como raíces y hojas, o dejando que se fermenten en agua por 24 o 48 horas, y con ello se conseguirá una mezcla lista para utilizar en los jardines o predios y cultivos.
“Estos extractos o insecticidas biorracional actúan principalmente de contacto por repelencia evitando la ingestión del insecto debido a que las plantas cuentan con metabólicos secundarios, los que vienen a hacer esta acción insecticida, en este caso la residualidad es nula o muy poca, dependiendo de la sustancia que sea la que actué como insecticida, pero no corremos riesgo al consumir este tipo de productos”, expresó.
De igual manera, destacó que esta alternativa abona al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030, ya que pretende lograr una seguridad alimentaria, la educación de calidad, al igual que la acción por el clima optando por medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
La investigadora consideró que es importante poder dar difusión y promoción de esta alternativa sostenible; no solo entre los agricultores, productores, estudiantes e investigadores, sino que también con la sociedad en general, ya que estas plagas también se pueden encontrar en huertos y jardines del hogar, y es necesario tomar conciencia de técnicas amigables con el medio ambiente.