Crea la Facultad de Biología de la UAS el Jardín de Polinizadores, espacio que busca ser refugio de especies colectores de néctar como las abejas
Crea la Facultad de Biología de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), a través del Cuerpo Académico de Investigación e Innovación en Ciencias Biológicas y Salud, el Jardín de Polinizadores, un espacio diseñado para atraer y ser refugio de especies como abejas, mariposas, colibríes y murciélagos, entre otros colectores de néctar.
Edith Salazar Villa, responsable de este Jardín e investigadora de la unidad académica, dijo que el aporte de este proyecto es brindar un lugar seguro a las especies, mencionando que algunas de ellas se encuentran en peligro de desaparecer, ejemplo de ello las abejas, las cuales cumplen un papel importante, por lo que los polinizadores son vitales para la reproducción de muchos tipos de plantas.
“Este proyecto no solo viene a formar parte de un espacio verde, sino de la red de mariposarios abiertos; espacio que busca conectar la ciencia, la conservación y las comunidades, espacios que se pretenden sean aulas abierta donde docentes, alumnos y visitantes conozcan y aprendan sobre Ecología y la Biodiversidad y su interacción entre comunidades biológicas”, compartió.
En este laboratorio natural, creado a raíz de un proyecto de Servicio Social integrado por brigadistas de Arquitectura y Veterinaria en conjunto con esta unidad académica, la universidad se proyecta no solo como una institución de innovación educativa, sino como una preocupada por la conservación de la naturaleza.
“Invitamos a la comunidad a participar en este tipo de proyectos tan importantes para que trasciendan hacia la sociedad; agradezco al Colectivo Silvestre, al Club de Jardinería Culiacán y al CAM por la donación de plantas y participar en el diseño y planeación de este jardín, invitando también a otras instituciones que se quieran sumar, ya que lo que se pretende es llevarlo a otras facultades y fuera de la universidad”, expresó.
Ante estos esfuerzos por el medio ambiente, recordó que las abejas atraviesan un gran problema debido a la agricultura intensiva que hace uso de plaguicidas sintéticos, los cuales han perjudicado a esta especie tan importante, por lo que contar con este tipo de espacios para las polinizadoras sería contribuir con un grano de arena a su existencia.
Otro uso que se le puede dar a este tipo de lugares es también usarlos como espacios de paz necesarios en la sociedad actual, por lo que la sociedad puede sumarse a estos proyectos diseñados con especies nativas de la región, de las cuales se conocen son alimento que gustan y buscan estas especies de polinizadores.